Muchas veces los hombres tienen más ropa que las mujeres.
Si el dinero está, pero la actitud falla, necesitan pensar de nuevo las prioridades.
La mayoría del tiempo que estén juntos será comiendo. Ya sea porque sólo se ven en la mañana mientras desayunan o en la noche después del trabajo.
Al principio los dos seguramente querrán hacer todo bien, perfecto y organizado. Poco a poco la realidad aparece y nos mostramos como somos verdaderamente.