Una vez abierto tu rímel de pestaña, debes utilizarlo en el transcurso de tres meses y después tirarlo. De esta manera evitas bacterias dañinas para tus ojos.
No la bombees en exceso, ya que al hacerlo le entra oxígeno y se puede secar prematuramente.
Aplícala desde la raíz de las pestañas hacia la punta. No te concentres solamente en las puntas.
Haz movimientos verticales hacia arriba y hacia a los lados , tipo zigzag. De esta manera logras un efecto tridimensional.
Aplica máximo dos capas. Así evitarás los grumos que no se ven bien.
Dobla el palo del aplicador justo antes del cepillo para que usarla sea aún más fácil.
Cuando lo apliques mira hacia abajo y de esa forma no mancharás el párpado fijo superior.
Otra Nota: