Allí colocaban carteles en los que se leía: "¿Te estás rompiendo la cabeza con tu tarea escolar? ¿Te preocupa tener que pagar 3000 dólares por una nueva matrícula si suspendes? Deja que MyMaster lidie con tus preocupaciones y facilite tus estudios".
La prensa local califica de enorme "fraude educativo" que amenaza la credibilidad y posición de algunas de las instituciones más prestigiosas como Nueva Gales del Sur y en especial a su centro más reputado, la Universidad de Sydney.
La compañía pirata, MyMaster, dirigida por una ciudadana de origen chino y orientada a los estudiantes de esa comunidad por Internet, comenzó a funcionar en mayo del 2012 y prestaba servicios académicos sobre filosofía, economía, leyes, ingeniería, astronomía o marketing. Un diario local la llegó a definir como una "factoría de copiar".