A las 9:30 de la noche subió el Mariachi Azteca al escenario, las notas de "Juan Charrasqueado" se dejaron oír y Vicente apareció vestido con su tradicional traje de charro color vino, y el público lo recibió eufórico.
La multitud, que desde muy temprano empezó a ingresar al estadio, nuevamente le ovacionó luego de su primera interacción con ellos, él agradeció los aplausos y les prometió: "Ustedes no dejan de aplaudir y su Chente no deja de cantar hasta que desquiten lo que pagaron".
Y así continuó durante tres horas con éxitos como "Por tu maldito amor", "Lástima que seas ajena", "Me voy a quitar de en medio", los mismos que mezcló con canciones de su nuevo álbum "Para siempre", entre las que se encuentran "Estos celos", coreada a todo pulmón por el público, especialmente los que se encontraban en el sector de las gradas.
Les cantó también "Nos estorbo la ropa", "Para siempre", "La derrota", "El último beso" y "El chofer", en una noche inolvidable para todos los salvadoreños.