En vez de ir a su boda, el señor huyó a Maui con el anillo, la computadora y la tarjeta de crédito de su prometida. (Para casarse con otra.)
La cereza de la torta es que Jackson también se llevó el anillo de diamantes con el que se comprometieron a casarse. Los investigadores sostienen que a los pocos días de fugar el hombre se casó en Hawaii con otra mujer.
¡¿Se atreven a más?! El hombre al parecer usó la tarjeta de crédito de la damnificada en Hawaii para comprar… flores.