Un rumano debió soportar que le informaran que no podían renovarle sus documentos porque había muerto.
"Me explicaron que morí en 1994 de una enfermedad pulmonar. Al parecer me hicieron una utopsia y me enterraron en una localidad vecina", explicó Hus.
Una investigación reveló que la confusión se produjo por la muerte en un hospital de un hombre con el mismo nombre. Ahora, el viaje está retrasado porque Hus debe esperar a que revoquen su certificado de defunción antes de que puedan renovarle sus documentos.