¿Eres de los que pasa la madrugada en vela y no precisamente por tengas un horario laboral nocturno?
El no poder dormir es un mal que aqueja a miles de mexicanos, y estudios científicos indican que es por el estilo de vida que llevas, además de que el estrés y malos hábitos, empeoran la calidad del sueño.
Aquí te dejamos 5 simples consejos para que puedes reconciliarte con tu almohada.
1. Controlar la cafeína
El consumo de cafeína necesariamente debe evitarse después del mediodía si a la noche se desea dormir adecuadamente. El café, el té y otras bebidas con altos contenidos de cafeína pueden mantener a este psicoactivo alcaloide trabajando en el organismo durante unas 5 horas y puede tardar hasta un máximo de 14 horas en salir.
2. Controlar las siestas
Las siestas tienen muchos beneficios en el cerebro. No obstante, si no somos responsables con nuestras siestas, pueden convertirse en un problema. Una siesta debe desarrollarse entre el mediodía y las 16:00 horas, siendo muy importante que no dure más de entre 30 y 45 minutos, de lo contrario, el cerebro entra en estados del sueño más profundos y el ciclo de sueño se termina afectando, algo que notarás cuando a la noche, cuando realmente quieras irte a dormir, te resulte difícil.
3.- Hacer ejercicio temprano, no en la noche
Muchas personas creen que hacer ejercicio a la noche les ayuda a dormir mejor y más rápido, sin embargo ésto no es cierto. Se recomienda hacer ejercicio entre 4 y 6 horas antes de ir a dormir, puesto que el ejercicio aumenta la temperatura corporal y genera más dificultades e incomodidades al momento de dormir.
4. Establece horarios para dormir
Para lograr tu cometido de dormir bien, necesitas establecer horarios en los que te irás a dormir y otros en los que vas a despertarte. Intenta no quedarte esos 5 minutos más después de que suena la alarma e incluso, en la medida en que sea posible, respeta estos horarios aún en los fines de semana. Esto genera en nuestro cerebro una costumbre que pronto terminará por naturalizarse en nosotros, reforzando el ritmo circadiano natural del sueño y regulando las variables biológicas en intervalos de tiempo adecuado.
5. Convierte tu habitación en una tumba
Si quedarte dormido más rápido y con mayor facilidad es lo que deseas, tu peor enemigo será la luz. No es exageración: convierte tu habitación en una tumba o procura que se parezca lo más posible a una. Tu habitación debe ser oscura, fresca y tranquila. Es muy importante evitar todo dispositivo electrónico en la habitación, ya que el espectro azul de luz artificial que tiene la enorme mayoría de estos limita la producción hormonal de N-acetil-5-metoxitriptamina o melatonina, muy influyente en la conciliación del sueño.
Así que adelante, haz estos simple consejos y verás excelentes resultados en tu hábito de dormir.
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